Mentalízate para la «operación bikini»

El verano se acerca y tenemos que empezar a programar la llamada “Operación bikini”. En estos meses nos tenemos que dedicar un poco más a cuidar nuestro físico para lucir bien en esta época del año, para poder enseñar nuestro cuerpo sin complejos, con vestidos cortos, camisas apretadas, camisetas sin mangas…

Para muchos es una frustación no llegar a tiempo y haber perdido tan solo un par de kilitos en el intento ¿Qué podemos hacer para ser más eficaces? Esta es la pregunta que se hacen miles de personas en todo el mundo.

No es fácil, pero tampoco extremadamente difícil. Si nuestra problema de peso, a no ser que se trate de una cuestión de obesidad que deba ser tratada por médicos, es deshacernos de cinco, diez o quince kilos tan solo se trata de mentalizarnos y cambiar nuestros hábitos alimenticios. Y eso no es fácil pero tan solo se trata de una cuestión de planteamiento. Pero no hay que hacerlo de forma radical sino que podemos plantearlo como un proceso que seguiremos poco a poco.

Lo primero que debes hacer es plantearte un objetivo, por ejemplo: “recuperar mi peso ideal”. A partir de ese momento se tratará de visualizarlo constantemente y mentalizarte de que todo lo que sobra se debe ir fuera de tu cuerpo.

Puedes leer todos  los libros del mundo sobre el tema, ir a las consultas de los principales dietitas y nutricionistas, pero te darás cuenta de que lo más importante es tu capacidad de elegir cambiar tus hábitos a la hora de comer. Podrías elaborar un planing como éste:

1ª semana: incorporar a mi dieta pan totalmente integral ya que llena más y engorda menos.

2ª semana: Incorporar pasta y arroces integrales. Además de llenar más contienen fibra y te ayudarán a limpiar los intestinos.

3ª semana: Dejar de tomar fruta después de las comidas. Es mucho mejor tomarla antes y además te saciará y te quitará el hambre.

4ª semana: Añadir a tu dieta mucha más verdura, si es cruda y al vapor mucho mejor. Te llena de minerales que son tan necesarios para la formación de los huesos. Y además no engorda nada de nada.

5ª semana: Puedes tomar carne o pescado sin grasa mientras que puedes limitar el consumo de embutidos o huevos.

Esto es solo un ejemplo porque no queremos darte ninguna dieta. De lo que se trata es de que te hagas a la idea de que planificando unos mínimos cambios semanales podrás alcanzar lo que en un principio te puede parecer imposible. Una vez que lo hayas asimilado el hábito crecerá día a día y formará parte de ti. Será entonces cuando te des cuenta de que este hábito de hacer las cosas correctas es tu mejor aliado.